JAMES NO LLEGÓ AL JUNIOR
Se terminó la novela: James Rodríguez se irá a México y no jugará en el Junior de Barranquilla.
“Salió faltón” fue tendencia en X el viernes de la semana que hoy termina.
Algunos reconocidos periodistas dieron a conocer que uno de los puntos que se negociaron fue el impuesto al patrimonio. Naturalmente, no hay un solo negocio jurídico en el que el tema impositivo no resulte protagonista.
Los impuestos son tan importantes que, en dos películas sobre el fin del mundo, las personas más inteligentes llamadas a salvarlo piden que, si todo sale bien, nunca más tengan que pagar impuestos. El primero es Peter Dinklage en Pixeles (Pixels) junto con Adam Sandler, y el segundo es Steve Buscemi en Armageddon junto con Bruce Willis.
El problema de James, al menos en lo tributario, es, al igual que Falcao, un problema de residencia fiscal, uno de los atributos de las personas naturales al momento de determinar el sistema de depuración de su renta y de los ingresos y patrimonio a declarar: los universales para los residentes y los nacionales para los no residentes. El problema no es que sean sujetos pasivos del impuesto al patrimonio; hoy, con seguridad, lo son. El problema radica en tener que liquidar el impuesto al patrimonio como residentes fiscales.
Uno imagina que el mayor patrimonio James no lo posee directamente en el país. En todo caso, el impuesto al patrimonio que debió preocuparles era el del 1 de enero de 2026, un tiempo corto pero suficiente para realizar una planeación tributaria, incluso la más básica: controlar los criterios de residencia fiscal definidos en el artículo 10 del ET, dentro de los cuales, seguramente, el más problemático habría sido el de permanencia física.
No hay certeza sobre la renovación de Falcao con Millonarios, pero es importante recordar que el término del conteo de los más de 183 días a los que se refiere el artículo mencionado del ET no corresponde a un periodo gravable de un año calendario (1 de enero al 31 de diciembre), sino a cualquier periodo de 365 días consecutivos. Si la memoria no me falla, Falcao ingresó a Colombia a mediados del año pasado. Si Falcao renueva con Millonarios, será imposible que no sea residente fiscal por permanencia física y deberá declarar el patrimonio universal que posea el 1 de enero de 2026. Desconozco en qué países se encuentra el mayor patrimonio de Falcao; podría ser Mónaco. También es posible que, en este tiempo, sus consultores tributarios hayan tenido bastante trabajo.
Regresando a James: él es libre de ir a jugar donde quiera, donde le convenga, donde le paguen más, donde le paguen los impuestos y la rescisión del equipo español. Pero la “chiflada” en el próximo partido de la selección en Barranquilla la apuesto con cualquiera.
Ahora, solo espero que, si algún día viene a la costa, lo haga en el equipo más grande de la B: el Real Cartagena. El chiste se cuenta solo.
Nota:
En la semana que inicia mañana tendremos dos eventos importantes:
Contador Público
Socio de Impuestos en Guerra, De la Espriella & Guerra.
Estudios de Derecho finalizados
Especialista en Impuestos
Maestrante en Derecho Comercial
Docente de Postgrado y conferencista
Coautor del libro: Reforma Tributaria Ley 2277 de 2022 de Nueva Legislación.
Autor de las cartillas de Renta personas naturales, Información Exógena Nacional y Régimen Simple de Tributación de Impuestos con Botas.
