HICE UNA PREGUNTA

En un rato de procrastinación pregunté ayer por Twitter a muchas personas lo siguiente:

¿Si usted tuviera la posibilidad de eliminar, modificar o adicionar algo a la reforma tributaria, que sería?

En el momento en el que escribo esta columna (7:24 am), he recibido las siguientes respuestas:

César Caballero (@C_caballeroR):

1. Plantear una baja progresiva de la tarifa nominal de renta, del actual 35% a un 30%. Condicionado a una evaluación del comportamiento de recaudo al quitar las exenciones propuestas.
2. Una tarifa diferencial para zonas francas: 20% y una retención en la fuente para lo vendido en territorio nacional, con IVA.
3. En el tema de las iglesias: exigir un reporte más transparente de activos y gastos, y que ellas excluyan lo que no tienen que ver con el ejercicio de la fe. Lo demás con el tratamiento normal. Documentos abiertos al escrutinio público.

Felipe Orjuela (@FelipeOrjuelaR):

1. No gravar las devoluciones de saldos o indemnizaciones sustitutivas de pensiones por debajo de 7000 UVT (que es alrededor de lo que necesita alguien para pensionarse) porque están gravando algo que no es pensión: es afectar al que no se pudo pensionar.
2. Reducción de tarifa nominal de renta a jurídicas. Tal vez podríamos usar la categoría de empresas del Artículo 2.2.1.13.2.2 del Decreto 957 del 2019 para proponer impuestos diferenciados según empresa. Se que baja el recaudo, pero es lo justo, sobre todo si se quiere que los dividendos pasen a sumar en la renta líquida gravable de personas naturales.
3. Me asusta un poco los efectos del impuesto a empresas extranjeras con “presencia económica significativa”. Entiendo que la OCDE está trabajando en un marco global de pilares para ese tipo de impuestos, pero hasta que no nos pongamos de acuerdo todos, eso solo podría ser distorsionante para el mercado (doble tributación).
4. Algunos beneficios tributarios me parece que tienen sentido jajaja esa es la difícil porque pues, es favorecer a unos sectores y a otros no.
5. De dividendos me gusta siempre y cuando bajen la tarifa de renta a jurídicas. Si no, me parece difícil.

Daniel Andrés Sandoval Pedreros (@Danisandovalp):

Yo modificaría la tarifa a las empresas (la bajaría, dado que se van a eliminar la mayoría de los beneficios) y dejaría un tramo exento mayor para los dividendos, como ocurre con las ganancias ocasionales.

Martin Jaramillo L (@Tinojaramillo)

Impuesto al patrimonio sin duda. Destruye las startups completamente.

Lo eliminaría. Es un pésimo impuesto. En Colombia tenemos que estar fomentando el ahorro, no castigándolo.

En cuanto a la discusión de tarifas diferenciales en personas jurídicas por su tamaño: Nooo. Las empresas no son ricas ni pobres. Son grandes o pequeñas.

Una empresa pequeña con dueños ricos no puede pagar menos que una empresa grande con dueños igual o menos ricos.

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Aún faltan más de 20 personas por responder y dentro de esas un gran numero de mujeres, pero en estas cuatro respuestas hay un común denominador, la tarifa de renta en personas jurídicas debe disminuir.

Hagamos un poco de memoria, con la Ley 2010 de 2019 la tarifa nominal del impuesto de renta en personas jurídicas comenzó a disminuir cada año, del 33% bajaría al 30% para el 2022 disminuyendo un punto porcentual cada año. El 30% nunca llegó en el 2022 porque la Ley 2155 de 2021 incrementó la tarifa que en el 2022 debía ser del 30% al 35%, recordemos todo lo sucedido con la fallida reforma tributaria de Carrasquilla.

El tema es que el actual proyecto de reforma tributaria elimina exenciones al impuesto de renta, lo que quiere decir que, manteniendo condiciones iguales una persona jurídica por el 2023 tendría una tasa real de tributación superior a la del 2022, toda vez que la renta liquida gravable en el 2023 será superior porque en su depuración no podrá restar o disminuir las rentas exentas eliminadas.

Así las cosas, lo ideal sería eliminar las exenciones, pero disminuir la tarifa nominal, lo que no parece tener en mente el ministro Ocampo, hoy conocemos algunas proposiciones en ese sentido, toca esperar.

En relación con las personas jurídicas, en estas últimas semanas se ha escuchado desde diferentes sectores y partidos políticos la propuesta de tarifas diferenciales al impuesto sobre la renta en pequeñas y medianas empresas, así como lo planteó Felipe Orjuela (@FelipeOrjuelaR) y con lo que no está de acuerdo Martin Jaramillo L (@Tinojaramillo).

El “problema” es que esa tarifa progresiva en personas jurídicas medianas y pequeñas fue una promesa de campaña del hoy presidente Petro, así lo recordó en nuestro último El Debate Live el Dr. Ricardo Bonilla. Al parecer esta idea no goza de la bendición del ministro Ocampo, quien ha manifestado en las últimas horas que esto no es una opción, que para esto (progresividad) existe el Régimen Simple de Tributación. Alguien debería decirle al ministro que es necesario un rango con tarifa 0 en el SIMPLE, así su afirmación tendría más sentido, incluso, hay personas jurídicas que nunca podrían ir al RST, ¿qué pasa con el derecho a la igualdad ahí?

Es importante recordar que con la Ley 1429 de 2010 nacieron unas tarifas diferenciales del impuesto de renta para pequeñas y medianas empresas, las cuales fueron derogadas por la Ley 1816 de 2016. En la exposición de motivos de esta última se lee: “En línea con este argumento, la Comisión hace énfasis en que la desigualdad en el tratamiento entre sectores económicos y empresas, a raíz de los múltiples beneficios, se refleja en tarifas efectivas muy dispersas, lo cual no tiene ningún sustento técnico, creando condiciones para la competencia desleal y evasión”.

Estos últimos han sido los argumentos que ha esbozado el ministro Ocampo en sus entrevistas, por lo que veo poco probable que la nueva reforma traiga tarifas diferenciales. Ahora bien, lo poco probable no lo hace imposible, teniendo la cantidad de proposiciones que existen también en este sentido.

Tengo el presentimiento que veremos algo parecido a lo que sucedió en la Ley 2010 del 2019 pero así:  34% para el 2024, 32% para el 2025, 31% para el 2026 y 30% en los años siguientes.

Amanecerá y veremos.

Carlos Guerra

@impuestosconbotas